Nos ha declarado la guerra,
le cogemos el guante y empezará nuestra defensa.

Pero antes de la batalla,
unas cuantas cosas le quiero aclarar,
que cuando usted llegó a este centro para concursar,
se le dio todo bien clarito lo que tenìa este personal,
derechos y deberes que usted quedó conforme,
a la hora de contratar,
y que ahora solo quiere que cumplamos los deberes,
y los derechos nos quiere quitar,
porque según usted, por eso pierde un dineral.

No nos creemos ná, porque si fuera así,
por patas se querría marchar,
y como no es así,
la vida nos quiere amargar.

Que sepa usted Garbialdi,
que éste personal tiene mucha dignidad,
y que no nos vamos a dejar pisar todo,
lo que con mucho sacrificio,
sudor y lágrimas conseguimos batallar,
y que si es necesario
lo volveremos a luchar.

Pero, no dude que muchas patadas usted nos tendra que dar,
para que nuestras cabezas haga inclinar,
porque si una de ellas desfallece
y quisiera inclinar,
allí estará otra compañera
para que si hiciese falta,
sujetar la de ella y la de alguna más,
porque en nosotras está la fuerza,
que usted jamás podrá inclinar.

Porque Garbialdi,
cualquier agravio que usted nos haga,
se lo hace también a los que tenemos detrás,
que son nuestras familias que de nuestro esfuerzo,
su futuro será.

Aunque mala fama usted nos quiera echar,
trabajamos cómo la que más,
ya que éste centro,
sin nosotras no es ná.

Con toda educación,
nos despedimos de usted,
que nos deje trabajar en paz,
y que la puerta está abierta,
¡CÓJALA Y VÁYASE YA!

Plantilla de Limpieza del Hospital Clinico San Carlos de Madrid